Por lo tanto, si alguno está en Cristo,
es una nueva creación. ¡Lo viejo ha pasado,
ha llegado ya lo nuevo!
2 Corintios 5:17
¿De dónde has venido? La perona que eras antes
de que Cristo entrara en tu vida debería desaparecer. Los hábitos y actitudes que te definían antes, deberían ser cambiados. Eres una nueva criatura. En tu corazón se ha abierto una puerta para que Cristo entre a través de ella, trayendo amor, compasión, interés por los demás, honestidad, justicia y abnegación. Cada característica que define a Cristo, ahora puede definirte a ti. Es una lucha mantener alejada a esa vieja persona, con todos sus hábitos y actitudes; es difícil deshacerse de
los viejos hábitos.
Comienza cada día pidiéndole al Señor que te ayude para que la nueva persona brille por sobre la vieja naturaleza. Pídele que brille a través de ti, para que la nueva persona se manifieste y la vieja desaparezca.
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